5 formas en que Internet ha cambiado nuestra vida

Internet ha cambiado nuestra vida hasta cotas de las que ni siquiera nosotros mismos somos conscientes en algunas ocasiones. Desde escuchar música hasta nuestras relaciones sociales, estas 5 formas en que Internet ha cambiado nuestra vida confirman la reinvención total a la que el mundo ha sucumbido durante un último lustro totalmente innovador.

Escuchar música

¿Recuerdas aquellos tiempos en los que aguardabas toda la mañana con una cinta de cassette para grabar la última canción de Michael Jackson en tu emisora? ¿Los CDs que grababas en cantidades industriales en el Nero? Todo eso ha cambiado gracias a plataformas en streaming como Spotify o Apple Music, las cuales te permiten escuchar un sinfín de canciones in situ o bien archivarlas en tu smartphone para disfrutarlas durante esas aventuras bajas en wifi.

Leer las facturas

“Estos del banco dicen que me meta en Internet para consultar las facturas, ¿y eso cómo se hace?” Frase típica de un padre poco amigo de las tecnologías al que no le queda otra opción que adaptarse a la revolución industrial 2.0. Si supera esto y encima se atreve a utilizar Skype mientras estudias en el extranjero entonces puedes darte por satisfecho.

Ligar

He aquí el gran salto social que supone Internet en lo que respecta a las relaciones, si bien en ocasiones no todos los cambios son positivos. Apps como Tinder o Badoo han permitido a usuarios de todo el mundo protegerse bajo fotos concisas y etiquetas a la hora de buscar a su media naranja (o amante de la semana) como una forma más práctica, y quizás superficial, de encontrar el amor. Y aunque tu amiga no lo reconozca, ella también lo tiene en su móvil.

Promocionar tu empresa

La adaptación de las empresas es el otro gran cambio que ha supuesto Internet a la hora de consolidar nuevas estrategias de marketing y hacer llegar nuestro producto a las masas. Los contenidos o las redes sociales se han convertido en dos de los  aliados clave a la hora de comercializar un producto y llegar a cuantas más personas sea posible, una tendencia que no hará sino aumentar a lo largo de los próximos años.

Comprar

Pedir un libro en Amazon o conseguir un juego de Nintendo del año 95 en Ebay son dos ejemplos de la reinvención consumista que vive el mundo desde que venciésemos los prejuicios y nos adentrásemos en esas tiendas online en la que comprar resulta más eficaz que nunca. Un complemento a muchas empresas que también han descubierto el acierto de sustituir las vitrinas físicas por escaparates interactivos.