5 motivos para adorar el otoño
Cuando vuelve el otoño, algo se remueve en nuestro interior. Atrás quedan los meses de verano, vuelven los atascos a la gran ciudad, las mangas largas, mantas y responsabilidades a la rutina. Sin embargo, estos 5 motivos para adorar el otoño nos recuerdan las muchas ventajas de la que es la estación más nostálgica del año.
Los platos de caliente (de tu madre)
Tras meses de gazpacho y ensaladas, existen pocos placeres comparables al hecho de acercarse a una mesa y deleitarse con un buen puchero o cocido, con ese guiso que te transporta de nuevo a la infancia. Tú has intentado ya muchas veces eso de cocinar de caliente y hacer uso de los tuppers congelados para toda la semana, pero no es hasta que vuelves a casa de tu madre cuando realmente te entregas a los garbanzos y el tocino.
El placer de una manta
Dormir más horas de lo normal envuelto en una manta es uno de esos pequeños grandes placeres que dentro de poco podremos poner en prácticas. Posturas imposibles, nuevas moradas bajo las sábanas y la necesidad de dormir abrazados sin acabar envueltos en sudor complementan las muchas bendiciones de una mantita bajo la que sobrevivir al otoño y el invierno.
Halloween
¿Quién no espera a Halloween para sacar la ropa más hortera del armario y volver a recrearse en todos esos tópicos del 31 de octubre? Películas de miedo, disfraces imposibles, calabazas y la perfecta excusa para organizar la fiesta del año entre amigos son algunos de los principales componentes de la fiesta más terrorífica del año.
La ropa de entretiempo
A estas alturas del año todos estamos ya cansados de las camisetas y los shorts, deseando poder enfundarnos la manga larga, las chaquetas y blazers. La ropa de entretiempo es nuestra favorita a la hora de poder combinar prendas y lucir outfits mucho más variados en comparación al verano o un invierno en el que priman los jerseys con cinco capas debajo y el mismo chaquetón durante tres fríos meses.
Más tiempo en casa
Cuando en pleno mes de julio tu WhatsApp no sonaba un viernes comenzabas a deprimirte. Todos tus amigos, menos tú, estabas de vacaciones, y las seductores noches de verano te incitaban a quedarte en casa con el ventilador puesto y las crisis existenciales tumbadas junto a ti en el salón. En otoño, y gracias especialmente a Netflix, quedarse en casa ya no supone un mal plan. Y de hecho, hasta agradecemos poder hacerlo.
¿Por qué te gusta a ti el otoño?